Modal te llamamos
Modal te llamamos
La importancia de la salud dental en personas mayores
La salud bucodental en mayores es fundamental para mantener una buena calidad de vida, ya que influye en el estado físico general de la persona. Sin embargo, unos hábitos descuidados en este ámbito pueden tener consecuencias graves.
Hay que tener en cuenta que en la tercera edad la dentadura tiene unas necesidades específicas, tal y como ocurre en otras etapas vitales (por ejemplo, durante la infancia). Por lo tanto, es necesario un cuidado constante y seguir el calendario de revisiones anuales marcado por el dentista.
Cuando envejecemos qué le sucede a nuestra dentadura
Entre las principales alteraciones que sufren los dientes y las encías de los adultos mayores destacan las siguientes:
- Pérdida de elasticidad en los tejidos
- Los tejidos bucales se retraen y adelgazan
- Los huesos, encías y mandíbulas se hacen más vulnerables, pierden densidad y fortaleza.
- Por el debilitamiento del sistema inmunitario es cada vez más difícil curar las infecciones.
- Hay una disminución de la tasa de renovación celular.
El uso diario de medicamentos, propio de estas edades, puede provocar alteraciones en las glándulas salivares y sequedad de boca o xerostomía, con los siguientes problemas asociados:
- Úlceras bucales
- Infecciones por hongos
- Problemas de masticación y deglución
- Caries
- Enfermedad periodontal (patología crónica que destruye las encías y el hueso que sostiene los dientes).
¿Por qué es importante el cuidado dental en las personas mayores?
Obviamente, los dientes y encías no son ajenos al envejecimiento que afecta al resto del cuerpo. Pero este deterioro puede ralentizarse si se toman medidas para el cuidado eficaz de la salud bucodental en mayores.
Utilizamos la boca constantemente, para comer, beber, respirar, hablar… El correcto ejercicio de cada una de estas actividades puede influir en el estado general de nuestro organismo. Y para ello necesitamos una buena salud bucodental.
Qué consecuencias tiene una mala higiene bucodental en adultos mayores
Entre las consecuencias de una mala higiene de la salud bucodental en mayores destacan las siguientes:
- Dolor de encías, con las consiguientes dificultades para masticar y comer.
- Sequedad bucal, que afecta tanto al habla como a la alimentación.
- Problemas estéticos, que repercuten en la autoestima de la persona.
- Influye de forma negativa en el estado de salud general, siendo la causa o factor agravante de diferentes enfermedades, por ejemplo, infecciones pulmonares, gastrointestinales, diabetes, patologías cardiovasculares…
Consejos para cuidar la salud bucodental en la tercera edad
El cuidado de la salud bucodental en mayores debe ser diario. Las organizaciones médicas recomiendan consejos sencillos y efectivos para su protección.
En los centros de Caser Residencial, ayudamos a nuestros residentes a llevar un constante cuidado dental para evitar problemas como los comentados anteriormente.
Asegurar una buena higiene oral
- Cepillado dental: se recomienda realizarlo después de cada comida con un dentífrico fluorado. Al menos 2 veces al día y, en cualquier caso, es imprescindible cepillarse los dientes antes de irse a dormir por la noche. El cepillado debe durar al menos 2 minutos. No olvidar cepillar la lengua para una limpieza total.
En caso de que llevar una prótesis removible, hay que retirarla antes del cepillado. - Uso de hilo dental, colutorios y enjuagues bucales: el uso de hilo dental es otro de los puntos recomendados por los expertos para la correcta higiene entre los dientes. Los enjuagues deben utilizarse siempre como complemento, no como sustituto del cepillado.
Productos de higiene bucal: Pasta de dientes y Cepillo
- Pasta de dientes: lo ideal es utilizar pasta de dientes con flúor, que evite la acción perjudicial de las bacterias en la boca y disminuya su actividad.
- Cepillo de dientes: se aconseja un cepillo suave que no dañe el esmalte dental ni las encías. Después del cepillado, limpiar y dejar secar el cepillo para que no acumule gérmenes ni bacterias. Renovarlo cada 3 meses.
Evitar la sequedad bucal
Para prevenir y controlar la sequedad bucal o xerostomía se recomienda beber mucha agua. La correcta hidratación aumenta de forma notable la producción de saliva. En cualquier caso, es recomendable consultar con el dentista para determinar su causa.
Cuando la sequedad bucal se debe a la ingesta de medicamentos, existen productos para combatirla. Hay que acudir al dentista para ver si es conveniente cambiar de fármaco, ajustar la dosis o qué tratamiento puede ser más eficaz.
De esta forma, se pueden evitar las molestias al hablar, masticar y tragar, incomodidades con la dentadura postiza, etc., que pueden llegar a producir llagas e incluso infecciones por hongos.
Limpieza y mantenimiento de la prótesis dental
Cuando hablamos del cuidado de la salud bucodental en mayores no solo nos referimos a sus dientes y encías naturales, sino también al mantenimiento de la prótesis dental en caso de que se utilice.
Es importante retirarla y proceder a su limpieza después de cada comida, con un cepillo y jabón. Es conveniente quitarla a la hora de dormir para permitir el descanso y regeneración de los tejidos.
Visitar al dentista regularmente
El cuidado de la salud bucodental de la persona mayor en casa es fundamental, pero también lo es seguir un calendario de visitas regulares con su odontólogo.
Llevar un seguimiento por parte del dentista es necesario para prevenir cualquier problema. Este hábito ayudará a tener claras las pautas a seguir para una óptima salud bucodental en mayores.
En los centros de Caser Residencial disponemos de un servicio de dentista que acuden a los centros de forma periódica para revisión y mantenimiento de la salud bucodental de nuestros mayores.
Otros hábitos para cuidar la dentadura en la tercera edad
El cuidado de la salud bucodental en mayores requiere constancia y atender a diferentes aspectos. Existen otros hábitos que se pueden introducir en la vida cotidiana y que resultarán beneficiosos para este fin.
Atención a los alimentos duros o pegajosos
Se aconseja evitar los alimentos duros o pegajosos o tomarlos con mucha precaución. Pueden dañar tanto la propia dentadura como la prótesis.
En cuanto a los dulces, hay que limitar su consumo, especialmente antes de irse a la cama.
Proteger los labios
Es conveniente humedecer con frecuencia los labios usando vaselina o crema de cacao con protección solar.
Qué hacer cuando aparecen llagas
Si aparecen las temidas llagas o aftas bucales, hay que cuidar su tratamiento para impedir que la lesión vaya a más.
Evitar las comidas picantes y enjuagar la boca con agua con sal y bicarbonato puede ayudar a controlarlas.
Si las molestias se prolongan es necesario acudir al dentista.
Conclusión
Seguir diariamente los hábitos recomendados en casa y visitar periódicamente al dentista contribuye al cuidado de la salud bucodental en mayores y, por extensión, al mantenimiento de su salud general. Una boca sana y funcional es necesaria a cualquier edad, pero en la tercera edad es preciso atender a sus necesidades específicas. No hay que descuidarse.