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Como afecta un golpe de calor a las personas mayores
Oficialmente ya es verano, una de las épocas más deseadas para salir, disfrutar con los amigos y viajar. Las personas mayores aprovechan estos meses para pasar tiempo con su familia y sus nietos, sin embargo, el verano trae consigo ciertos riesgos para ellos, como los golpes de calor.
Los niños y las personas mayores de 65 años son los que mayor riesgo corren a la hora de sufrir un golpe de calor. En este post contamos que es un golpe de calor, sus principales síntomas, y como actuar.
Que es un golpe de calor
Un golpe de calor es el aumento de la temperatura corporal ocasionada por una exposición prolongada al sol y a las altas temperaturas. El cuerpo puede llegar a superar los 41ºC, perdiendo el control de la temperatura y su capacidad para regularla.
Cualquier persona puede sufrir un golpe de calor, sin embargo, es más común en niños y personas mayores, debido a que su capacidad para controlar la temperatura es menor.
Con el envejecimiento, las personas mayores van perdiendo la sensación de frio y calor. Al tener una menor sensación de calor, se protegen menos, siendo más vulnerables a sufrirlo.
Síntomas de un golpe de calor
La exposición a altas temperaturas puede provocar un golpe de calor ocasionado por el uso de demasiada ropa o por deshidratación, al no beber el agua suficiente para recuperar los líquidos que se pierden por la sudoración.
Esta situación puede dar lugar a varios síntomas, entre los que se encuentran:
- Dolor de cabeza y mareos.
- Aumento excesivo de la temperatura corporal.
- Náuseas.
- Piel enrojecida y caliente.
- Sudor.
- Cansancio y somnolencia.
Factores de riesgo frente al calor y la deshidratación
Aunque los grupos con mayores posibilidades de sufrir un golpe de calor son los niños y las personas mayores, cualquiera puede verse afectado. De hecho, existen algunos factores que aumentan el riesgo.
- La edad es un factor determinante. Los mayores tienen mayor dificultad para mantenerse hidratados y detectar el calor.
- Realizar ejercicio o algún tipo de actividad física durante las 10 y 16 horas en verano.
- Aunque un golpe de calor se produce cuando se está expuesto a elevadas temperaturas durante varias horas, estar varios días en un ambiente caluroso con temperaturas superiores a 36º C puede producir fatiga y tener más posibilidades de sufrir un golpe de calor.
- La ingesta de algunos medicamentos y la presencia de enfermedades cardiovasculares o pulmonares pueden aumentar el riesgo.
Recomendaciones para evitar esa situación
Los golpes de calor se pueden evitar teniendo en cuenta algunas indicaciones para sobrellevar las altas temperaturas y manteniendo el bienestar de las personas mayores:
- Llevar ropa cómoda y ligera. Llevar prendas ajustadas impide que el cuerpo se enfríe de manera adecuada. También es recomendable el uso de sombreros o gorros para proteger la cabeza del sol.
- Utilizar cremas protectoras para evitar las quemaduras del sol.
- Hidratarse bien. Beber constantemente, agua, zumos, infusiones frías, etc evitando el alcohol, bebidas gaseosas y con cafeína.
- Comer alimentos frescos con mucho contenido en agua; gazpachos, ensaladas, gelatinas, frutas como la sandía, el melón, evitando comidas copiosas.
- Ducharse con agua fría.
- No exponerse al sol entre las 12 y las 16 horas. Son las horas de mayor intensidad y se debe evitar la exposición al sol en ese intervalo de tiempo.
- No estar en el interior de un coche durante mucho tiempo cuando este se encuentre estacionado. La temperatura aumenta en poco tiempo.
- Permanecer en estancias ventiladas y con aire acondicionado.
Como ayudar a alguien con un golpe de calor
Si cree que alguien está sufriendo un golpe de calor o detecta algún síntoma de los previamente mencionados, es recomendable seguir las siguientes indicaciones:
- Llamar inmediatamente a los servicios de emergencia - 112
- Llevar a la persona a una zona sombreada.
- Quitar el exceso de ropa si fuera necesario.
- Bajar la temperatura corporal, enfriando a la persona rápidamente con lo que se tenga disponible en ese momento. Por ejemplo, meterle en una bañera fría, una ducha fría, ponerle toallas mojadas en el cuerpo, con hielo, etc.
- Ofrecer agua fresca para hidratarle.